Apelación a la unidad y cohesión de todos

Nos llama la atención, a muchas mujeres que militamos con vocación en el peronismo, aquí en Formosa, las expresiones vertidas por el doctor Vicente Joga, donde se pone al servicio de todos los formoseños, y defiende la idea de la constitución o armado de una nueva fuerza política… “distante” del oficialismo gobernante, y sobre todo lo hace como peronista disidente, calificativo que elude precisamente al ser peronista... Esta referencia, es concreta hacia el Gobierno nacional, a su política federal y a nuestro propio Gobierno provincial, que es peronista.
Históricamente el movimiento justicialista, el de Perón y Evita, como expresión política genuina y original, tuvo oscilaciones propias hacia la derecha o hacia la izquierda, sin embargo, por la misma fuerza de la doctrina y sobre todo sus principios y su filosofía humanista y cristiana, sus más de 60 años, lo mantienen vivo y vigente.

También debemos valorar lo que significa para el peronismo, la conducción y la organicidad, cuestiones que son plenamente inherentes. Las lecciones de la historia reciente, nos enseñaron, que cuando la Nación Argentina, requiere afrontar y superar cualquier crisis formulada y aplicada desde afuera, es siempre el pensamiento y la acción Nacional, Popular, Humanista y Cristiana, de los hombres y mujeres del peronismo, la que acude e irrumpe para reponer nuevamente la institucionalidad política, como en la profunda crisis del 2001 y el 2002. De ello las mujeres en argentina, tienen plena conciencia.
Desde el momento que en el País se puso en marcha un proyecto Peronista, recordamos, aquellas palabras del General en el histórico 1º de Mayo de 1974, cuando presentó el Modelo argentino expresando en un párrafo: “… El País necesita un modelo de referencia que contenga, por lo menos, los atributos de la sociedad a la cual se aspira, los medios de alcanzarlos, y una distribución social de responsabilidades para hacerlo…”.
Y entonces, Si “El peronista trabaja para el movimiento” y si “La política no es un fin sino un medio”, como algunas de las verdades, es bueno, reflexionar sobre la necesidad de aportar desde el pensamiento y desde la acción práctica, lo que cada una o cada uno tenemos para el movimiento; y por ello lo convocamos a una actitud más generosa, sin mezquindad, al reconocimiento, la valoración de un proyecto político de inclusión, como es el que se lleva adelante en Formosa, y con el cual la mayoría de los formoseños, sin distinciones están comprometidos con él.
Ese proyecto, tiene como referencia un modelo, que se gesta por el mismo anhelo, y el desafío que busca hacer efectiva la justicia social; son los mismos sueños y las mismas ansias de superar la pobreza y largas postergaciones federales… Y este proyecto, de tantas realizaciones y cambios sustanciales, tiene el liderazgo popular del Dr. Insfrán, tiene que ver precisamente con el pueblo formoseño, quien le ha dado vigencia y legitimidad…
El propio Perón en sus discursos expresaba: “Esclarezcamos nuestras discrepancias y, para hacerlo, no transportemos al diálogo social institucionalizado nuestras propias confusiones. Limpiemos por dentro nuestras ideas, primero, para construir en el diálogo social después”.
Tenemos que seguir enamorando a la juventud, de las grandes causas que el peronismo siempre despertó, tenemos que alentar y alertar, decir también , que el peronismo, no ha nacido para las tareas pequeñas sino para las cosas grandes, que vamos a ir a lo profundo de nuestras convicciones, que somos aun la misma fuerza del ‘45 en otro mundo, en otro realidad, sin perder de vista la identidad histórica, y es lo que da sentido a las acciones de gobierno e impregna las políticas públicas. Y es precisamente la justicia social, la que sigue siendo la bandera esencial del peronismo; como lo es también, la independencia económica y la soberanía política, en un mundo que aprieta con modelos deshumanizantes.
Por ello, es importante, haber leído el mensaje del Dr. Gildo Insfrán del 1ero de marzo, cuyo contenido justamente, habla de una posición para enfrentar la crisis internacional, en el marco del fenómeno de la globalización y sus efectos, reconoce entonces la gravedad de la misma, pero al mismo tiempo, apela a la unidad y la cohesión de todos, superando diferencias egoístas, bajo el único interés de la Nación. Así también, pone al justicialismo en alto, en la necesidad de generar un nuevo orden mundial, que tenga como paradigma al hombre, como persona, varón y mujer, principio y fin de toda acción política, como valor fundante.
Es entonces, que esta fuerza del propio movimiento, con su doctrina, con unidad, organización y solidaridad, y en definitiva, con la maravillosa fuerza de la militancia de ayer y de hoy, es quien seguirá dando de cada uno y en el conjunto, el aporte para alcanzar la felicidad del pueblo y la grandeza de la nación…Lo hacemos en la conciencia del lugar y la tarea que cada uno ocupa. El sentimiento peronista y su identidad histórica están por encima de toda diferencia.

Ana María del Riccio
Secretaria de la Mujer de la Provincia